El rojo signa al presupuesto de la ciudad

El gobierno de la ciudad finalizó el ejercicio 2014 con un déficit financiero de $1.638,8 millones, generado por ingresos que alcanzaron los $64.104,4 millones y gastos que totalizaron $65.743,2 millones.

 

Como los intereses de la deuda pública fueron de $1.282,1 millones, el resultado primario fue negativo en $356,7 millones, señala el informe de ejecución del presupuesto del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires correspondiente al cuarto trimestre de 2014, que elabora la Asociación Argentina de Presupuesto.

 

No obstante, y dado que hay algunas jurisdicciones extra poder ejecutivo que no han presentado la ejecución actualizada, si se proyectan esos gastos se profundiza el rojo, quedando el déficit financiero en $2.592,8 millones y el primario en $1.310,7 millones.

 

Tanto el déficit realizado como el proyectado fueron menores al registrado en 2013, ya que la tasa de incremento de los ingresos (+34,1% ia.) fue superior a la de los gastos (+31,0% el proyectado).

 

No obstante, la tendencia a los resultados negativos en la ciudad continúa afianzándose, ya que entre 2006 y 2014 todos los años, con la excepción de 2010, finalizaron con déficit.

 

Luego de la clara desaceleración en el ritmo de crecimiento registrada entre abril y septiembre, la recaudaciónlocal se recuperó en los últimos meses del año y cerró el ejercicio 2014 en $64.104,4 millones, lo que equivale a un incremento del 34,1% con respecto a los $47.792,5 millones percibidos en 2013.

 

Sin embargo, este porcentaje de variación está por debajo de la tasa de inflación anual medida por la Dirección de Estadística y Censos del GCBA (IPCBA), que alcanzó 38,0%.

 

En el último trimestre, la tasa de incremento de los recursos fue de 37,6%.

En términos absolutos, el crecimiento de los ingresos fue de $16.311,9 millones.

 

De ese total, 62,5% correspondió al Impuesto Sobre los Ingresos Brutos (ISIB), seguido por el Impuesto Inmobiliario con un 9,5%, la coparticipación federal de impuestos con 9,4%, el impuesto a los sellos 7,7% y el impuesto automotor 5,5%. El resto de los recursos aportó 5,4% de lo recaudado.

 

El impuesto sobre los ingresos brutos creció 35,1% en el cuarto trimestre, luego de haber fluctuado en torno del 25% de incremento en los meses previos.

 

De todas maneras, la principal fuente de recursos de la ciudad estuvo por debajo de la recaudación general, y registró una importante desaceleración con respecto a los primeros meses del año, cuando había llegado a 45,0% de crecimiento.

 

Al estar el ISIB íntimamente ligado a la evolución del PBG nominal, estas variaciones muestran el impacto que ha tenido la caída de la actividad económica sobre los recursos porteños.

 

Si bien ingresos brutos es determinante para la estructura de ingresos local, esta menor tasa de crecimiento se vio parcialmente compensada por los incrementos registrados en el resto de los recursos.

 

Los impuestos al patrimonio crecieron 37,4% en el año, con una suba de 37,0% en el impuesto inmobiliario y de 38,2% en el automotor.

 

En este último caso, que mantuvo durante todo el año variaciones cercanas a 40% ia., la suba de los precios de los vehículos cubrió con creces la menor cantidad de ventas de 0 km.

 

El impuesto a los sellos, que a partir de modificaciones en su base imponible había alcanzado tasas de expansión del orden de 60% interanual, luego moderó su crecimiento y cerró el ejercicio con una suba de 42,1% en el acumulado y de 41,9% en el trimestre.

 

La coparticipación federal de impuestos tuvo una suba de 39,4% en el cuarto trimestre, levemente por encima de las tasas registradas a lo largo de todo el ejercicio, y finalizó el año con una suba de 36,5%.

 

En términos generales, la mayor parte de las fuentes de recursos locales tuvo una aceleración en su tasa de expansión en el último trimestre del año, pero con vistas al 2015 aún es demasiado pronto para evaluar si efectivamente esto constituye un cambio de tendencia con respecto a lo observado en los primeros meses del ejercicio.

 

En cuanto al gasto, a lo largo del ejercicio 2014, el GCBA ejecutó $65.743,2 millones, lo que implica una diferencia de $14.844,8 millones por sobre los $50.898,4 millones devengados en 2013.

 

Al analizar la marcha de la ejecución se aprecia la desaceleración que se ha ido produciendo a lo largo del año, ya que luego de un primer trimestre que mostraba un incremento interanual de 40,8%, siguió una baja en la tasa de expansión a 34,2% ia. en el segundo trimestre, 29,8% en el tercero y finalmente un 29,2% ia. en el cierre del ejercicio.

 

Los gastos corrientes aumentaron 29,5% ia., mientras que los gastos de capital, que comenzaron el año con un incremento de 124%, bajaron a 27,7% en el acumulado anual, aunque este porcentaje muestra una cierta recuperación con respecto a lo ocurrido entre abril y septiembre, cuando la caída de la recaudación impactó de lleno sobre los proyectos de inversión.

 

Las remuneraciones alcanzaron los $29.645,9 millones, con un incremento del 27,7% ia., inferior al promedio de gastos y más de 10 puntos por debajo del índice de variación de precios local.

 

Tal como se explicara en informes anteriores, en los primeros meses del año pasado se habían registrado aumentos salariales a cuenta de lo que se acordara a lo largo del ejercicio, por lo que en la primera parte de 2014 la tasa de incremento de las remuneraciones era más baja de lo esperable, situación que se ha ido revirtiendo con el correr de los meses hasta llegar a estos valores. De esta manera, el gasto en personal ascendió a 45,1% del total ejecutado, el mínimo de los últimos diez años.

 

Los gastos de consumo totalizaron $14.044,0 millones, 34,6% más que en 2013, por encima del promedio general de gastos.

 

De ese valor, $1.603,1 millones correspondieron a bienes de consumo, con una ejecución de 92,1% del crédito vigente.

 

La principal partida del inciso fueron los medicamentos del sistema de salud público de la Ciudad, que se llevaron $716,2 millones. Siempre dentro de los gastos de consumo, los servicios no personales devengaron $12.401,6 millones.

 

El contrato de recolección de residuos, el más importante que tiene el GCBA con el sector privado, insumió $3.819,6 millones, con un 45,6% de incremento sobre los $2.624,0 millones ejecutados en el ejercicio anterior.

 

También fueron importantes los servicios de distribución de comida para escuelas y hospitales, los contratos con empresas ($1.846,7 millones), los contratos con personas físicas ($1.459,5 millones) y la partida de publicidad ($620,5 millones).

 

Las transferencias corrientes alcanzaron los $8.080,7 millones, con un crecimiento de 23,7%, el menor porcentaje de aumento del gasto corriente. El 30,8% de ese valor, $2.485,8 millones, correspondió a los subsidios que se otorgan a los colegios privados, que crecieron 35,2%.

 

Los diferentes programas del Ministerio de Desarrollo Social repartieron $1.842,1 millones, de los cuales $599,7 millones correspondieron al programa Ciudadanía Porteña, que tuvo un incremento de 8,2% ia., muy por debajo del promedio de los gastos.

 

También fueron importantes las transferencias a SBASE, que llegaron a $1.181,3 millones, y al Hospital Garrahan -mantenido en partes iguales por la Ciudad y el Estado Nacional- que tuvieron una suba del 21,7% ia. y alcanzaron los $776,5 millones.

 

En lo que hace al gasto de capital, se devengaron $12.690,4 millones, 19,3% del total ejecutado. Este porcentaje es uno de los más altos de los últimos años y, teniendo en cuenta que en 2013 había sido de 19,5%, denota un nuevo nivel en cuanto a la participación del gasto en infraestructura y equipamiento sobre el total del GCBA. Sin embargo, el incremento interanual fue de 27,7%, menor al promedio de gastos y muy inferior a 51,9% de crecimiento que mostraba esta partida a mediados de año, lo que marca el impacto de la caída de la actividad económica sobre las finanzas locales.

 

Entre los principales proyectos de inversión, sobresalen las transferencias de capital efectuadas a SBASE, por $1.230,3 millones; las Obras de Infraestructura Urbana en Red de Subterráneos, con $848,2 millones; el proyecto de Mejoramiento de las Vías de Tránsito Peatonal y Vehicular, por $808,6 millones; el Cuidado y Puesta en Valor de Espacios Verdes, con $585,8 millones; el Plan Integral de Educación Digital -por el cual se distribuyen netbooks para alumnos de las escuelas primarias de la Ciudad- con $545,2 millones; las obras de mantenimiento de la red pluvial, con $435,9 millones; el tratamiento de residuos sólidos urbanos, con $380,3 millones y el programa de ejecución y rehabilitación de obras complementarias del Ministerio de Desarrollo Urbano, con $393,2 millones.

 

La ejecución por finalidad muestra un cierto grado de heterogeneidad, con un porcentaje de ejecución -sobre el crédito vigente de 84,3% para los Intereses de la Deuda Pública, 91,4% para los Servicios Económicos, 94,9% para los servicios de seguridad y un 95,3% para los servicios sociales. Si bien la Administración Gubernamental muestra un nivel inferior, con 79,6% de devengamiento, ello es producto de las jurisdicciones extra Poder Ejecutivo que no están integradas al Sistema de Gestión y Administración Financiera (SIGAF) e informan su ejecución con posterioridad.

 

En cuanto a la situación de la deuda pública, el monto total del nuevo endeudamiento autorizado al Gobierno de la Ciudad para el año 2014 ascendió a $4.818,7 millones.

 

A su vez, el stock de deuda informado al 31 de diciembre es de $18.302,1 millones, un 61,9% más que los $11.703,4 millones registrados al cierre de 2013. La deuda flotante alcanzó los $6.370,1 millones, mientras que a lo largo de todo el ejercicio se devengaron $2.132,5 millones en concepto de amortizaciones de capital.