Ayer ganó el Trumpcare. ¿Qué sigue?

Gracias a un denodado esfuerzo por parte de senadores republicanos durante toda esta semana, fue posible revocar Obamacare en la Casa de Representantes, o sea la cámara baja. Ahora pasa al Senado.

5 mayo, 2017

La aprobación del American Health Care Act por la Cámara de Representantes es apenas el primer round en una batalla muy larga. De todos modos, lo que ocurrió con la votación del jueves tenderá muchas consecuencias.

Aquí las cinco que enumera Anthony Zurcher para la BBC:

Trump logra borrar la incómoda derrota de marzo. Paul Ryan, Presidente de la Cámara, citó entonces fisuras en el partido republicano. Había que superar el momento logrando la aprobación,   ejerciendo mucha presión sobre los republicanos del House Freedom el Caucus y sacando del medio la suficiente cantidad de moderados como para poder quedar en mayoría.

 

Todos los ojos en el Senado. Ahora el proyecto pasa al Senado, donde le espera otra gran pelea. Si en la Casa de Representantes Ryan tenía una gran mayoría, en el senado el presidente Mitch McConnell solo puede perder dos votos y ya hay varios miembros de su partido que han manifestado reservas. Algunos parecen estar haciendo planes para ignorar la aprobación en la Cámara Baja y diseñar desde cero su propio plan de salud.

 

Más incertidumbre en el sistema de salud. Si el proyecto se llegara a convertir en ley tal como está, obligaría a las aseguradoras, a los proveedores de servicio y a compañías relacionadas a ajustarse a una nueva realidad a pocos años de que las reformas del Obamacare causaran sus propias revoluciones. Medicaid, el programa para los pobres, tendrá muchas reducciones y se rescindirán los impuestos a los individuos ricos que pagaban los subsidios a los seguros para la gente pobre. Los estados tendrán mayor libertad para eliminar los niveles mínimos de cobertura.

 

Los demócratas usarán esto en las elecciones de medio término. Los candidatos demócratas van a hacer lo imposible para pintar el proyecto como un recorte de impuestos a los ricos, que se paga con menos beneficios para la clase media y los pobres. En 1994 fueron ellos, los demócratas los que obtuvieron una resonante derrota durante el gobierno de Bill Clinton, cuando pasó exactamente lo mismo, cuando los republicanos se burlaron de ellos por aumentar los impuestos. Ayer los demócratas abandonaron el recinto cantando que esto les costará a los republicanos perder en las elecciones de medio término.

Peligra el legado de Obama. El Obamacare era la joya de la corona de los logros legislativos de Obama. Los demócratas pagaron un alto precio en las elecciones al implementar las reformas. Pero lo venían como que valía la pena.

Simultáneamente con la aprobación del proyecto de salud, una comisión de la Casa aprobó un proyecto que anularía las reformas al accionar de Wall Street que introdujo Obama. Paso a paso, el congreso controlado por los republicanos podría ir eliminando todo lo que lograron los demócratas durante los ocho años del gobierno de Obama.

 

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