El dólar, la nueva moneda de Ecuador
Ayer fue el último día de circulación para el sucre, la anterior divisa nacional. El proceso de dolarización iniciado en enero por el gobierno ecuatoriano desató varias marchas de protesta.
Desde hoy, la nueva moneda de Ecuador es el dólar, pues el sucre salió definitivamente de circulación dentro de un proceso de reformas que comenzó en enero de este año.
Así lo anunció ese mes el entonces presidente del país, Jamil Mahuad, (agosto 1998-enero 2000), quien fijó el tipo de cambio en 25.000 sucres, cuando en enero del 1999 estuvo en promedios de 7.119 sucres.
Ecuador y sus habitantes deberán empezar a acostumbrarse a manejar su economía en dólares y sus fracciones en versión local, en medio de la nostalgia por la desaparición de su moneda, después de 116 años de vigencia.
Las monedas y billetes estadounidenses se mezclan ahora con las nuevas monedas ecuatorianas, equivalentes a las fracciones del dólar, y que, aunque tienen efigies de personalidades locales, no han recibido un nombre oficial específico.
El uso de la moneda estadounidense genera aún muchos problemas entre la población por los cálculos de la conversión de sucres a dólares y por la falta de moneda menuda para los cambios.
Varios transportistas y comerciantes se han quejado por las dificultades para sus respectivos negocios y por los problemas con los clientes por la falta de moneda pequeña.
Con el fin de solventar la situación, el Banco Central (BC) ha atendido incluso el fin de semana para cambiar moneda y agilizar la circulación de las nuevas, acuñadas en México y Canadá.
Los movimientos sociales aseguran que la “dolarización” sucumbirá y por ello uno de los actos de despedida de la moneda local celebrados este fin de semana se denominó “Resucitará al tercer día”.
Pese a que en los hechos la “dolarización” avanza, sectores sociales e indígenas no pierden la esperanza de que se de marcha atrás en el asunto y anuncian que aumentarán sus protestas que comenzaron el pasado lunes con el denominado “levantamiento popular”, que ha tenido escasa acogida.
Desde hoy, la nueva moneda de Ecuador es el dólar, pues el sucre salió definitivamente de circulación dentro de un proceso de reformas que comenzó en enero de este año.
Así lo anunció ese mes el entonces presidente del país, Jamil Mahuad, (agosto 1998-enero 2000), quien fijó el tipo de cambio en 25.000 sucres, cuando en enero del 1999 estuvo en promedios de 7.119 sucres.
Ecuador y sus habitantes deberán empezar a acostumbrarse a manejar su economía en dólares y sus fracciones en versión local, en medio de la nostalgia por la desaparición de su moneda, después de 116 años de vigencia.
Las monedas y billetes estadounidenses se mezclan ahora con las nuevas monedas ecuatorianas, equivalentes a las fracciones del dólar, y que, aunque tienen efigies de personalidades locales, no han recibido un nombre oficial específico.
El uso de la moneda estadounidense genera aún muchos problemas entre la población por los cálculos de la conversión de sucres a dólares y por la falta de moneda menuda para los cambios.
Varios transportistas y comerciantes se han quejado por las dificultades para sus respectivos negocios y por los problemas con los clientes por la falta de moneda pequeña.
Con el fin de solventar la situación, el Banco Central (BC) ha atendido incluso el fin de semana para cambiar moneda y agilizar la circulación de las nuevas, acuñadas en México y Canadá.
Los movimientos sociales aseguran que la “dolarización” sucumbirá y por ello uno de los actos de despedida de la moneda local celebrados este fin de semana se denominó “Resucitará al tercer día”.
Pese a que en los hechos la “dolarización” avanza, sectores sociales e indígenas no pierden la esperanza de que se de marcha atrás en el asunto y anuncian que aumentarán sus protestas que comenzaron el pasado lunes con el denominado “levantamiento popular”, que ha tenido escasa acogida.
