Estampida del crudo
El petróleo siguió en alza por la tensión entre Irak y Kuwait. Las petroleras argentinas mantuvieron ayer los valores de los combustibles. La cotización del barril cerró a US$ 36,88.
19 septiembre, 2000
El petróleo sigue disparándose. Su cotización superó, ayer, los US$ 37 por barril en el mercado de Nueva York, ante la creciente tensión entre Irak y Kuwait y –el riesgo que ésta supone para la actividad productiva en la principal zona petrolífera del mundo–. La nueva crecida aun no se tradujo en nuevos aumentos de los combustibles en la Argentina.Repsol negocia con el gobierno no aumentar los combustibles; a cambio exige que se le extienda la concesión del yacimiento de Loma de La Lata.
En Brasil, la subida del precio del petróleo empezó a impactar en la economía. Ayer, la Bolsa de San Pablo cayó casi 4 puntos y trepó la cotización del dólar. Mientras tanto, en Estados Unidos no hay suficientes reservas de gas y fuel oil, necesarios para calefaccionar el duro invierno que se preanuncia.
El gobierno británico decidió ayer obligar a las firmas petroleras a garantizar el suministro de combustibles “bajo toda circunstancia”, tal como ya deben hacerlo las compañías de electricidad y de gas por ser consideradas “servicios públicos vitales”.
A pesar de la estampida, el ministro de Petróleo y Recursos Minerales de Arabia Saudita, Alí Al-Noaimi, pronosticó ayer en Brasilia que los actuales precios del “oro negro” bajarán pronto.
El petróleo sigue disparándose. Su cotización superó, ayer, los US$ 37 por barril en el mercado de Nueva York, ante la creciente tensión entre Irak y Kuwait y –el riesgo que ésta supone para la actividad productiva en la principal zona petrolífera del mundo–. La nueva crecida aun no se tradujo en nuevos aumentos de los combustibles en la Argentina.Repsol negocia con el gobierno no aumentar los combustibles; a cambio exige que se le extienda la concesión del yacimiento de Loma de La Lata.
En Brasil, la subida del precio del petróleo empezó a impactar en la economía. Ayer, la Bolsa de San Pablo cayó casi 4 puntos y trepó la cotización del dólar. Mientras tanto, en Estados Unidos no hay suficientes reservas de gas y fuel oil, necesarios para calefaccionar el duro invierno que se preanuncia.
El gobierno británico decidió ayer obligar a las firmas petroleras a garantizar el suministro de combustibles “bajo toda circunstancia”, tal como ya deben hacerlo las compañías de electricidad y de gas por ser consideradas “servicios públicos vitales”.
A pesar de la estampida, el ministro de Petróleo y Recursos Minerales de Arabia Saudita, Alí Al-Noaimi, pronosticó ayer en Brasilia que los actuales precios del “oro negro” bajarán pronto.