Polémica sobre la dolarización
La introducción del ´billete verde´ en Ecuador y El Salvador reabre la polémica sobre el posible abandono de las monedas nacionales. Según un diario español, técnicamente, la Argentina ya estaría dolarizada.
El diario El País publicó hoy (lunes 12) un artículo que advierte sobre el peligro que, para América latina, implica la dolarización.
Según este artículo, la llegada de George W. Bush a la Casa Blanca coincide con una nueva ofensiva de los partidarios de dolarizar las economías latinoamericanas, pone como ejemplo a Salvador y Ecuador.
El País señala que en la Argentina, Venezuela , Brasil y México, políticos y economistas discuten esta opción sin, hasta ahora, llegar a un consenso.
Lo cierto—asegura el artículo periodístico—es que el nuevo presidente de Estados Unidos tiene entre sus prioridades económicas establecer una serie de acuerdos de libre comercio con los países latinoamericanos.
Esta estrategia estadounidense, según diversos analistas, está fomentada por el delicado momento que atraviesa el Mercosur; “Los norteamericanos intentan debilitar el Mercosur en beneficio propio—continúa el diario español— .
Mientras que no se haya conseguido una estabilidad monetaria en el área, el dólar siempre será una referencia obligada para todo el hemisferio”, señala un experto del Banco Interamericano de Desarrollo quien asegura que “Ahí radica el enfrentamiento entre brasileños y argentinos de los últimos tiempos”.
El real brasileño estaba ligado al dólar mediante un sistema de bandas de oscilación hasta que Brasilia se vio obligada a devaluar su moneda a consecuencia de la crisis de 1998, y desde enero de 1999 se volvió al sistema de libre cambio, lo que ha supuesto una devaluación del real cercana a 50%.
La Argentina, desde que el Gobierno de Carlos Menem adoptó la Ley de Convertibilidad en 1991, tiene el peso atado al billete verde en la proporción de uno por uno; así, el abaratamiento de las exportaciones brasileñas y el encarecimiento relativo de las argentinas han originado un desequilibrio en el intercambio entre ambos países, que llevaron al gobierno argentino a adoptar una serie de trabas a la entrada de productos cariocas; así explican desde España la realidad económica de la región.
Como corolario del artículo, se evalúa que la dolarización ” agravaría la crisis política, al no lograr solucionar ni el tema de la competitividad ni la insolvencia estructural del sector público”.
En cuanto al caso puntual de la Argentina, el periódico español señala que el Fondo Monetario Internacional considera que un país debe ser considerado como “dolarizado” cuando tiene más de 30% de sus depósitos en dólares.
La Argentina, señala, ya tiene 60% de estos depósitos en la divisa norteamericana, 66% de los préstamos bancarios también están denominados en esa moneda, 92% de su deuda pública y 85% de la deuda privada.
Eso lleva a los defensores de la dolarización a afirmar que sería, solamente, la confirmación de una realidad ya existente.
El diario El País publicó hoy (lunes 12) un artículo que advierte sobre el peligro que, para América latina, implica la dolarización.
Según este artículo, la llegada de George W. Bush a la Casa Blanca coincide con una nueva ofensiva de los partidarios de dolarizar las economías latinoamericanas, pone como ejemplo a Salvador y Ecuador.
El País señala que en la Argentina, Venezuela , Brasil y México, políticos y economistas discuten esta opción sin, hasta ahora, llegar a un consenso.
Lo cierto—asegura el artículo periodístico—es que el nuevo presidente de Estados Unidos tiene entre sus prioridades económicas establecer una serie de acuerdos de libre comercio con los países latinoamericanos.
Esta estrategia estadounidense, según diversos analistas, está fomentada por el delicado momento que atraviesa el Mercosur; “Los norteamericanos intentan debilitar el Mercosur en beneficio propio—continúa el diario español— .
Mientras que no se haya conseguido una estabilidad monetaria en el área, el dólar siempre será una referencia obligada para todo el hemisferio”, señala un experto del Banco Interamericano de Desarrollo quien asegura que “Ahí radica el enfrentamiento entre brasileños y argentinos de los últimos tiempos”.
El real brasileño estaba ligado al dólar mediante un sistema de bandas de oscilación hasta que Brasilia se vio obligada a devaluar su moneda a consecuencia de la crisis de 1998, y desde enero de 1999 se volvió al sistema de libre cambio, lo que ha supuesto una devaluación del real cercana a 50%.
La Argentina, desde que el Gobierno de Carlos Menem adoptó la Ley de Convertibilidad en 1991, tiene el peso atado al billete verde en la proporción de uno por uno; así, el abaratamiento de las exportaciones brasileñas y el encarecimiento relativo de las argentinas han originado un desequilibrio en el intercambio entre ambos países, que llevaron al gobierno argentino a adoptar una serie de trabas a la entrada de productos cariocas; así explican desde España la realidad económica de la región.
Como corolario del artículo, se evalúa que la dolarización ” agravaría la crisis política, al no lograr solucionar ni el tema de la competitividad ni la insolvencia estructural del sector público”.
En cuanto al caso puntual de la Argentina, el periódico español señala que el Fondo Monetario Internacional considera que un país debe ser considerado como “dolarizado” cuando tiene más de 30% de sus depósitos en dólares.
La Argentina, señala, ya tiene 60% de estos depósitos en la divisa norteamericana, 66% de los préstamos bancarios también están denominados en esa moneda, 92% de su deuda pública y 85% de la deuda privada.
Eso lleva a los defensores de la dolarización a afirmar que sería, solamente, la confirmación de una realidad ya existente.
