El crecimiento de 2004 sería de 7%

Los sectores que crecieron más que el promedio incluyen a la industria automotriz y a la industria metalmecánica, la producción de minerales no metálicos, papel y cartón, productos químicos, caucho y plásticos.

1 marzo, 2004

Con excepción de los sectores productores de papel y cartón, la
refinación de petróleo y las industrias metálicas básicas,
que presentan niveles de utilización de su capacidad bastante elevados,
el resto de la industria muestra grados de utilización de entre 50% y 75%,
con la salvedad de que en la industria automotriz este porcentaje se reduce hasta
21%.

La semana pasada se conocieron los datos sobre el nivel de actividad del último
mes de 2003 que permiten realizar una estimación bastante cercana del
cierre anual. Como se preveía, el crecimiento de 2003 superó los
pronósticos más optimistas, ubicándose alrededor de 8,4%,
más del doble de las estimaciones oficiales de comienzos del año
anterior.

El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), registró en
el cuarto trimestre un crecimiento interanual de 10,4%, mientras que el crecimiento
desestacionalizado respecto al tercer trimestre fue de alrededor de 2%, completando
así siete trimestres consecutivos sin variaciones negativas.

La recuperación, sin embargo, apenas alcanza para recobrar alrededor
de dos tercios de 21% perdido desde el segundo trimestre de 1998 (máximo
de la serie) y el primer trimestre de 2002 (piso de la serie), momento desde
el cual el incremento acumulado alcanza a 12,5%.

Por otra parte, el arrastre estadístico (que surge de la diferencia entre
el promedio del año y el valor de la serie al final del año) resultó
superior a 3%, lo cual pone un piso bastante alto para el 2004. Si en 2004 se
registran variaciones trimestrales del orden de la mitad de las verificadas
en 2003, la tasa de crecimiento anual rondaría 7%.

Se conocieron, además, los datos del indicador de actividad industrial
del mes de enero de 2004, que mostraron un crecimiento desestacionalizado de
3,2% y una variación interanual de 12.2%.

Más allá de las oscilaciones mensuales, la actividad industrial
continúa mostrando una clara tendencia alcista que volvió a acelerarse
en la segunda mitad de 2003.

La comparación del acumulado anual muestra variaciones positivas en todos
los bloques industriales relevados por la encuesta (con excepción de
los productos del tabaco), aunque con amplias diferencias entre éstos.

Entre los sectores que crecieron más que el promedio se destacan “edición
e impresiones” y la industria automotriz y en un segundo orden de relevancia,
la industria metalmecánica, la producción de minerales no metálicos,
papel y cartón, productos químicos, caucho y plásticos.

Es interesante destacar, en este sentido, que con excepción de los sectores
productores de papel y cartón, la refinación de petróleo
y las industrias metálicas básicas, que presentan niveles de utilización
de su capacidad bastante elevados, el resto de la industria muestra grados de
utilización de entre 50% y 75%, con la salvedad de que en la industria
automotriz este porcentaje se reduce hasta 21%.

De esta forma, hay un margen razonable para que la expansión de la actividad
industrial continúe a lo largo de este año.

 

Con excepción de los sectores productores de papel y cartón, la
refinación de petróleo y las industrias metálicas básicas,
que presentan niveles de utilización de su capacidad bastante elevados,
el resto de la industria muestra grados de utilización de entre 50% y 75%,
con la salvedad de que en la industria automotriz este porcentaje se reduce hasta
21%.

La semana pasada se conocieron los datos sobre el nivel de actividad del último
mes de 2003 que permiten realizar una estimación bastante cercana del
cierre anual. Como se preveía, el crecimiento de 2003 superó los
pronósticos más optimistas, ubicándose alrededor de 8,4%,
más del doble de las estimaciones oficiales de comienzos del año
anterior.

El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), registró en
el cuarto trimestre un crecimiento interanual de 10,4%, mientras que el crecimiento
desestacionalizado respecto al tercer trimestre fue de alrededor de 2%, completando
así siete trimestres consecutivos sin variaciones negativas.

La recuperación, sin embargo, apenas alcanza para recobrar alrededor
de dos tercios de 21% perdido desde el segundo trimestre de 1998 (máximo
de la serie) y el primer trimestre de 2002 (piso de la serie), momento desde
el cual el incremento acumulado alcanza a 12,5%.

Por otra parte, el arrastre estadístico (que surge de la diferencia entre
el promedio del año y el valor de la serie al final del año) resultó
superior a 3%, lo cual pone un piso bastante alto para el 2004. Si en 2004 se
registran variaciones trimestrales del orden de la mitad de las verificadas
en 2003, la tasa de crecimiento anual rondaría 7%.

Se conocieron, además, los datos del indicador de actividad industrial
del mes de enero de 2004, que mostraron un crecimiento desestacionalizado de
3,2% y una variación interanual de 12.2%.

Más allá de las oscilaciones mensuales, la actividad industrial
continúa mostrando una clara tendencia alcista que volvió a acelerarse
en la segunda mitad de 2003.

La comparación del acumulado anual muestra variaciones positivas en todos
los bloques industriales relevados por la encuesta (con excepción de
los productos del tabaco), aunque con amplias diferencias entre éstos.

Entre los sectores que crecieron más que el promedio se destacan “edición
e impresiones” y la industria automotriz y en un segundo orden de relevancia,
la industria metalmecánica, la producción de minerales no metálicos,
papel y cartón, productos químicos, caucho y plásticos.

Es interesante destacar, en este sentido, que con excepción de los sectores
productores de papel y cartón, la refinación de petróleo
y las industrias metálicas básicas, que presentan niveles de utilización
de su capacidad bastante elevados, el resto de la industria muestra grados de
utilización de entre 50% y 75%, con la salvedad de que en la industria
automotriz este porcentaje se reduce hasta 21%.

De esta forma, hay un margen razonable para que la expansión de la actividad
industrial continúe a lo largo de este año.

 

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