Un cruzado de Bush y Cheney acusado por homicidio en Irak

Erik Prince fundó Blackwater, dedicada a seguridad bélica. Ahora el ex ejecutivo afronta cargos por inspirar o llevar a cabo el asesinato de testigos incómodos. Operando con militares en Irak, había semiprivatizado una guerra perdida.

7 agosto, 2009

<p>Las v&iacute;ctimas pod&iacute;an revelar actividades il&iacute;citas de su empresa y manchar el prestigio de un &ldquo;cruzado civil&rdquo;, seg&uacute;n definici&oacute;n de George W.Bush y Richard Cheney. El lunes 3, un ex infante de marina y un funcionario de Blackwater &ndash;hoy testigos protegidos- se presentaron ante un tribunal federal de Virginia.<br />
<br />
Sus relatos confirman el perfil de Prince (40 a&ntilde;os) como contratista y activista. No s&oacute;lo prove&iacute;a de guardias privados para operaciones en Irak (conflicto ya perdido), Afganist&aacute;n &ndash;de destino incierto- y tal vez Pakist&aacute;n, tambi&eacute;n se consideraba personalmente en guerra con todo el Islam. Vale decir, desobedec&iacute;a al general David Petraeus (comandante para el sudoeste asi&aacute;tico) y al propio BarackObama.<br />
<br />
El odio a los musulmanes lo condujo a parangonar sus &ldquo;tropas&rdquo; con los caballeros templarios (siglos XII a XIV). Los hab&iacute;a autorizado a disparar a sobre cualquiera y los presionaba para hacerlo. Envuelto en ideas de &ldquo;supremac&iacute;a cristiana&rdquo;, sus acciones tal vez hayan originado la ola de ataques a iglesias en Pakist&aacute;n e India.<br />
<br />
Pero esa ret&oacute;rica no era desinteresada. Durante a&ntilde;os, la compa&ntilde;&iacute;a trafic&oacute; ilegalmente armas de guerra, escondidas en bolsas de comida para perros y transportadas por una aerol&iacute;nea vinculada a Blackwater v&iacute;a una red de firmas fantasmas establecidas en para&iacute;sos fiscales. Sus templarios medievales se convert&iacute;an en mercaderes.<br />
<br />
Metido en crecientes dificultades, el cruzado perdi&oacute; contratos con el departamento de Estado y el Pent&aacute;gono (gestionados inicialmente por Cheney). Asustado, el &ldquo;se&ntilde;or de la guerra&rdquo; se ocult&oacute; mientras destru&iacute;a documentos, videos y correos electr&oacute;nicos comprometedores. Simult&aacute;neamente, ordenaba a sus guardias eliminar a quienes pudiesen &ldquo;traicionarlo&rdquo;. Ahora, Prince debe comparecer ante el Congreso para dar explicaciones (si lo encuentran). Dato hist&oacute;rico sugestivo: cuando los templarios peleaban en Palestina, entre sus enemigos estaban los secuaces del mes&iacute;as Has&aacute;n as-Sabah. Eran los hashash&iacute;n (asesinos).</p>
<p>&nbsp;</p>

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades