Schäuble y los siete años de vacas flacas
En 2011/17, afrontaremos una fase débil, algo así como una japonización de Occidente. Así sostuvo el ministro alemán de hacienda al cerrar un simposio en Lindau. Ahí, Jens Weidmann jefe del Bundesbank- había criticado los rescates en la Eurozona.
28 agosto, 2011
<p>El funcionario europeo, no político, más relevante advirtió que “tal vez afrontemos siete años de vulnerabilidad económica y financiera”. Naturalmente, este ortodoxo recomendaba “austeridad, disciplina fiscal y reformas estructurales en los países más expuestos”. Salvo en cuanto a una necesaria reactivación, Schäuble y Weidmann se oponen de plano a Joseph Stiglitz (Nobel 2001) y Paul Krugman (2008).<br />
<br />
Estas cosas sucedían justamente en una reunión de Nobel económicos, aunque no en Alemania sino en Sankt Gallen, Suiza. Las sesiones fueron dirigidas por una condesa sueca, Bettina Bernadotte. Volviendo al ministro teutón, insistió varias veces en una receta no distante de Chicago, “esencial para Grecia, Portugal, Irlanda, España, Italia y Estonia”.<br />
<br />
Pero los premios Nobel presentes –Stiglitz, Krugman, Robert Mundell, etc.- en general no coincidieron con los alemanes. Excepto Edmund Phelps, James Mirres y Robert Aumann, alineados con lo que John Kenneth Galbraith llamaba “la sapiencia convencional”. Más cáustico, Stiglitz comparó la actual situación en Occidente con la edad media europea.<br />
<br />
Durante un debate previo al simposio, en Lindau, William White (ex econometrista jefe del Banco de Ajustes Internacionales, Basilea) fue inesperadamente terminante. “Los especuladores financieros –señaló- estaban ocupados ganando dinero, en tanto los gobiernos recaudaban emitiendo deuda soberana y los bancos centrales se centraban obsesivamente en la estabilidad de precios”.<br />
<br />
Por el contrario, las pocas alusiones a China, India, Brasil o Argentina fueron elogiosas, pero no partieron de los monetaristas. Finalmente, fue llamativo que Phelps –un matemático adorado por los ortodoxos locales- también vislumbrara una “japonización” de Occidente. Esto es, una larga recesión sistémica como la iniciada allá en 1990/91.</p>
<p> </p>
<p> </p>
<p> </p>