Mario Draghi predica la austeridad como salida
El presidente del Banco Central Europeo reiteró un severo mensaje ortodoxo a los países endeudados de la periferia zonal. Mientras, España afronta una huelga general y arrecian las protestas en Portugal. El funcionario rechaza la flexibilidad.
26 marzo, 2012
<p>“No hay trueque factible entre las reformas económicas y los ajustes fiscales”, señaló en una entrevista con el Financial Times, la segunda desde que Grecia obtuvo su segundo salvataje (€ 142.000 millones). Como lo afirmaba tiempo antes hablando con el Wall Street Journal, “dar marcha atrás en metas presupuestarias provocaría reacciones en los mercados y elevaría los diferenciales de tesas sobre el canon alemán”.<br />
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Sin duda, Draghi irrumpe en pleno debate sobre las bondades (o defectos) de una mayor austeridad como receta para el sobreendeudamiento. Con Atenas sometida a un torniquete socialmente deletéreo, fruto de la canciller Angela Merkel, la ambivalencia del italiano lo empuja a actitudes duras.<br />
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Transgrediendo sus propios antecedentes ideológicos, el director gerente del BCE señaló que “el modelo social europeo está moribundo”. En otros términos, ya no funciona el capitalismo renano y desaparece el estado de bienestar.<br />
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Tras calificar como poco realistas las expectativas cifradas en auxilios de China o Japón, “las crisis europeas seguirán como hoy. O sea, obligando a nuestros países a reformas ortodoxas que aseguren prosperidad a largo plazo”.</p>