El temible fantasma de la estanflación
Los historiadores aconsejan no apresurarse ante las formas iniciales de un fin de época. Es necesario tener un poco de paciencia antes de llegar a las conclusiones centrales. Para muchos, ahora estamos presenciando lo que parece ser la declinación del segundo coloso, el más grande, el que determinaba las reglas de juego a las que su oponente soviético debía adaptarse una y otra vez hasta que finalmente llegó a su nivel de agotamiento y se derrumbó.
Contenido exclusivo para usuarios registrados.Para continuar leyendo esta nota, Ud. debe ser suscriptor.
Suscríbase a Revista Mercado
Conocé todos nuestros planes.
Suscribirme ahora
