Un problema crónico de liderazgo pobre

Según un análisis que la consultora estadounidense Development Dimensions International (DDI) realizó en colaboración con el laboratorio de gestión de Gary Hamel, la calidad del liderazgo en las empresas estadounidenses es pobre y no muestra señales de mejorar.

22 septiembre, 2011

<p>Por otro lado, los directivos est&aacute;n sofocando la creatividad y la innovaci&oacute;n, por la tendencia a frenar nuevas formas de negocio derivada de su temor a correr riesgos en &eacute;poca de crisis. Actualmente, los l&iacute;deres se centran sobre todo en salvaguardar sus puestos dentro de las compa&ntilde;&iacute;as. Por Iv&aacute;n Abreu Anaya.</p>
<p>Lo que ahora se ha comenzado a llamar &ldquo;la crisis de los pa&iacute;ses desarrollados&rdquo; de refleja, en Estados Unidos, en una crisis general de la empresa. Empezando porque su propia crisis oblig&oacute; a recortes presupuestarios en las empresas de todo tama&ntilde;o y la desaparici&oacute;n de muchos puestos de trabajo.</p>
<p>Seg&uacute;n el vicepresidente de DDI, Wellins Rich, la investigaci&oacute;n que dio lugar al informe &ldquo;Previsi&oacute;n Global de Liderazgo&rdquo; cambiaron las pr&aacute;cticas pero no cambian los l&iacute;deres.</p>
<p>En el censo que realizaron para medir la calidad del liderazgo en las empresas encuestadas, s&oacute;lo un tercio de los directivos cumplen con las metas establecidas. Tampoco hay confianza en la calidad de las personas que se perfilan como sucesores de los actuales n&uacute;mero uno. Uno de cada cinco gerentes dijo dudar de la l&iacute;nea del posible liderazgo futuro. Seg&uacute;n DDI, uno de los mayores problemas es la falta de una planificaci&oacute;n de la sucesi&oacute;n.</p>
<p>En la investigaci&oacute;n se determin&oacute; que menos de la mitad de las empresas (44%) cuenta con procesos de identificaci&oacute;n de talento de alto potencial para conducir, y a&uacute;n menos compa&ntilde;&iacute;as (37%) tienen un proceso instalado para el cultivo de esas personas.</p>
<p>El problema es que la identificaci&oacute;n y desarrollo de talento futuro no es considerada prioridad entre las habilidades que debe tener un l&iacute;der. Eso explica, tal vez, que cuatro de cada 10 nuevos dirigentes admiten no saber encontrar nuevos talentos.</p>
<p>El informe revela tambi&eacute;n que la cuarta parte de las empresas encuestadas carece de plan de sucesi&oacute;n. <br />
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