BP cada vez más empetrolada

El infierno comenzo en 2010, cuando se hundió  la plataforma Deepwater Horizon provocando el más horripilante derrame petrolero de la historia. Desde entonces un grupo de ambientalistas lucha para que BP no lave su imagen auspiciando arte.

25 abril, 2016

 Después de 26 años de auspiciar la Tate Gallery de Londres, British Petroleum (BP) anunció en que 2017 termina la era del auspicio. El motivo, dice la compañía, es “un clima de negocios extremadamente difícil” y nada tiene que ver con las repetidas protestas de activistas contra la contaminación del planeta.

 

El   año pasado los manifestantes de “Liberate Tate” se pasaron 25 horas consecutivas dibujando mensajes sobre cambio climático sobre el piso del Turbine Hall de la nueva Tate Modern. En noviembre ocuparon parte de la galería y comenzaron a tatuarse la fórmula CO2 en el cuerpo para manifestar su repudio a una empresa que sigue extrayendo un recurso tan contaminante.

“Libarate Tate,” responsable de la organización de las protestas, dijo que miles de personas reclaman a la galería de arte londinense que finalice su contrato con BP por razones éticas. Con ese fin repiten acciones cada tanto.

 

El año pasado, luego de una batalla legal que duró tres años, la Tate Gallery dio a conocer por primera vez la cantidad de dinero que había aportado BP a lo largo de 17 años: 3,8millones de libras esterlinas en anualidades que oscilaron entre 140.000 y 330.000, lo que da un promedio de 224.000 libras al año.

 

La divulgación de esos datos significó también que se revelaran los auspicios de BP a instituciones de arte, que incluyen la Royal Opera House, el Museo Británico, la National Portrait Gallery y la Royal Shakespeare Company.

 

El 11 de marzo de este año “Liberate Change” decidió tomar medidas concretas para detener a una empresa que considera culpable de muertes y desastres como pocas. Más de 70 personas, todas de negro y con velos negros sobre la cabeza en señal de luto, ocupó el hall central de la Tate Modern, se sentó en el piso y comenzó a escribir con carbonilla mensajes contra la persistente destrucción del planeta por parte de petroleras como BP. En opinión de sus voceros, no es posible que se permita a empresas como ésta presentarse ante la sociedad como ángeles benefactores.

 

 

Por su parte, un vocero de la Tate Gallery explicó a la prensa que el auspicio de 26 años fue una de las inversiones empresariales más importantes de Gran Bretaña para el arte y la cultura. Expresó al mismo tiempo su gratitud al persistente apoyo de BP a sus programas.

 

14 millones de libras anuales para el CEO

 

A pesar de que hace ya varios años que se discute en el mundo el tema de los sueldos excesivos que reciben los ejecutivos, con independencia de los resultados financieros de las compañías que manejan, a pesar también de las manifestaciones en contra y de las promesas de asociar sueldo con desempeño, de tanto en tanto el mundo se entera de que todo sigue como siempre.

 

En BP 60% de los accionistas votaron en contra de un paquete remunerativo de 14 millones anuales de libras esterlinas para Bob Dudley, director ejecutivo de una empresa que registra pérdidas, que recortó miles de puestos de trabajo y que congeló el sueldo de los empleados.

 

BP es una de las muchas empresas británicas que enfrentan la rebelión de sus accionistas sobre remuneración ejecutiva. Esto ha provocado que el Institute of Directors (una organización que representa a directores individuales de empresas) diga que las empresas deben responder a la furia de sus accionistas porque de lo contrario provocarán el descrédito de toda la comunidad empresarial.

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