Lo simple puede ser lo mejor
En una escena de la primera película de la saga de Indiana Jones, el héroe se enfrenta con el villano de lujosas y elegantes espadas y, con la más absoluta sencillez, suspira y lo mata de un tiro. Aunque violento, el mensaje no deja lugar a dudas: lo simple es lo mejor. Muchos bancos enfrentan hoy versiones corporativas de ese hombre de las espadas cuando tienen frente a sí a competidores que los superan en tecnología e inversión. Las técnicas del llamado marketing de guerrilla ofrecen armas sencillas y accesibles para salir airosos de tales combates.
17 noviembre, 2012
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