El desafío transatlántico

El año pasado, la alemana Daimler-Benz y la estadounidense Chrysler se fusionaron, dando lugar a una gigante automotriz inimaginada hasta poco antes, con ingresos por US$ 145.000 millones y 430.000 empleados en 200 países. Jürgen Schrempp, presidente del directorio de la nueva firma, opina sobre cómo, a medida que las corporaciones se globalizan, los gobiernos nacionales tendrán cada vez menos influencia.

17 noviembre, 2012

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