Hewlett-Packard, escándalo y un ataque de especuladores
Un administrador de fondos afirma que la crisis de H-P le ha costado US$ 14.000 millones. El acoso sexual de Mark Hurd, hoy ex director ejecutivo, a Jodie Fisher fue el peor error en control de daños colaterales, sostiene Lawrence Ellison (Oracle).
14 agosto, 2010
<p>Por supuesto, resulta irónico que entidades tan especuladoras como los fondos inversores, jubilatorios inclusive, se lancen sobre el mayor fabricantes mundial de computadoras personales, tachándolo de “poco transparente”. A la sazón, un estudio jurídico de Connecticut, Scott & Scott, radicó el viernes una demanda contra el directorio de H-P por US$ 14.000 millones, acusándolo de “gestión incorrecta y violación de acuerdos fiduciarios”. Víctima de las maniobras era Brockton Contributory Retirement System, especie de AFJP que especula con dinero de los aportantes.<br />
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Hurd tiene su historia. Instrumentado en 2004/06 por los enemigos internos de Carleton Fiorina, cuya “gestión borrascosa” dobló la capitalización bursátil de la empresa, se lo proclamó “hombre clave del gran cambio”. El objeto era borrar a Fiorina por ser mujer y, para colmo, autoritaria. Por cierto, Hurd dirigió la incursión en telefonía inteligente, con la compra de Palm.<br />
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¿Jodie Fisher fue clave del ataque? En general, analistas y medios duchos en el sector creen que no. La breve actuación de Hurd, apenas más larga que la de Fiorina, “le bastó para cometer graves faltas contables y operativas”, señala Ellison.<br />
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Tampoco era sensato, para un hombre casado y con hijos, comprometer su carrera en ese agitado romance con una cincuentona en decadencia. Hace tiempo que Foster sólo aparece en películas clase B o C, generalmente pata televisión. Cuando rompieron, la dama le entabló un juicio por dos millones y reveló que Hurd gastaba con ella plata de la empresa. <br />
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