AOL TW pasará a pérdidas de US$ 10.000 a 14.000 millones
Finalmente, AOL Time Warner admitió, ante un grupo de analistas de Wall Street, que proyecta asumir cargos contables por US$ 10.000 millones. Algunos expertos temen que la suma llegue realmente a 14.000 millones.
10 enero, 2003
Por supuesto, los motivos de esta grave decisión no sorprenden a nadie, pues se cifran en la amplía caída de ingresos y rendimientos en la división America Online. Vale decir, el componente “AOL” del megagrupo, a cuyo respecto se extienden las dudas –internas y externas- sobre la sensatez de su espectacular fusión, hace tres años.
La obvia inviabilidad económica y financiera de America Online hace sospechar, a varios analistas, que el monto final pasado a pérdidas puede alcanzar los US$ 14.000 millones. La diferencia surgiría de ampliar los cargos para cubrir quebrantos en AOL Europe y AOL Latin America. El conglomerado piensa, asimismo, desprenderse de negocios en TV por cable y crear una firma separada.
“Obviamente –señala un informe de Nomura Securities New York-, esto abre el camino al desarme de una megafusión que no ha dado resultados. El problema es que ejecutivos, banqueros y consultores no se animan a reconocer públicamente que la prodigiosa ola de fusiones y adquisiciones iniciada en 1998 es contraproducente y debe terminar”.
Por supuesto, los motivos de esta grave decisión no sorprenden a nadie, pues se cifran en la amplía caída de ingresos y rendimientos en la división America Online. Vale decir, el componente “AOL” del megagrupo, a cuyo respecto se extienden las dudas –internas y externas- sobre la sensatez de su espectacular fusión, hace tres años.
La obvia inviabilidad económica y financiera de America Online hace sospechar, a varios analistas, que el monto final pasado a pérdidas puede alcanzar los US$ 14.000 millones. La diferencia surgiría de ampliar los cargos para cubrir quebrantos en AOL Europe y AOL Latin America. El conglomerado piensa, asimismo, desprenderse de negocios en TV por cable y crear una firma separada.
“Obviamente –señala un informe de Nomura Securities New York-, esto abre el camino al desarme de una megafusión que no ha dado resultados. El problema es que ejecutivos, banqueros y consultores no se animan a reconocer públicamente que la prodigiosa ola de fusiones y adquisiciones iniciada en 1998 es contraproducente y debe terminar”.