Lazio: necesita plata y ofrece acciones a los jugadores
Una baja en la cotización del equipo le generó a la Lazio 206 millones de pérdidas. Ahora, debe enjugarlas y precisa, de entrada, 110 millones. Por eso, trata de convertir a los depreciados jugadores en accionistas.
El amplio proceso deflacionario que sufre el fútbol en Italia y otros países europeos afecta también la cotización bursátil de los jugadores. En el caso de la Lazio (el femenino es por “squadra”), un decreto de necesidad y urgencia para salvar de la quiebra a los clubes le permite, de un plumazo, recortar de € 250 millones a poco más de 42 millones el “valor en libros” del equipo (-83%). Por ejemplo, las estrellas Jaap Stam, Dejan Stanković, Bruno Corradi, Claudio López y Stefano Fiore hoy valen, juntas, apenas millones. O sea, lo que el club le pagó al Manchester United por Stam solo.
El decreto ha sido sancionado pese a que la Comisión Europea se opone y amenaza con declararlo inválido. Una de sus cláusulas le otorga a la Lazio diez años para recortar el quebranto (€ 206 millones) por depreciación del recurso humano. También se prevén mecanismos contables en caso de vender o ceder jugadores por encima de sus valores en el balance. Hay otros problemas; entre ellos, si es posible imponer a los jugadores la compra de acciones o si éstos la resistirán judicialmente, igual que las drásticas rebajas contempladas en sueldos, premios, etc.
Entretanto, se inicia una búsqueda de nuevos inversores, pedida por los bancos acreedores, para emitir € 110 millones en acciones. Ahí es donde aparece la hipotética venta a los propios jugadores. Pero ni el mayor acreedor, Capitalia, ni otros bancos quieren pilotear la operación, porque no les parece seria y no desean enfrentarse a la Comisión Europea.
El amplio proceso deflacionario que sufre el fútbol en Italia y otros países europeos afecta también la cotización bursátil de los jugadores. En el caso de la Lazio (el femenino es por “squadra”), un decreto de necesidad y urgencia para salvar de la quiebra a los clubes le permite, de un plumazo, recortar de € 250 millones a poco más de 42 millones el “valor en libros” del equipo (-83%). Por ejemplo, las estrellas Jaap Stam, Dejan Stanković, Bruno Corradi, Claudio López y Stefano Fiore hoy valen, juntas, apenas millones. O sea, lo que el club le pagó al Manchester United por Stam solo.
El decreto ha sido sancionado pese a que la Comisión Europea se opone y amenaza con declararlo inválido. Una de sus cláusulas le otorga a la Lazio diez años para recortar el quebranto (€ 206 millones) por depreciación del recurso humano. También se prevén mecanismos contables en caso de vender o ceder jugadores por encima de sus valores en el balance. Hay otros problemas; entre ellos, si es posible imponer a los jugadores la compra de acciones o si éstos la resistirán judicialmente, igual que las drásticas rebajas contempladas en sueldos, premios, etc.
Entretanto, se inicia una búsqueda de nuevos inversores, pedida por los bancos acreedores, para emitir € 110 millones en acciones. Ahí es donde aparece la hipotética venta a los propios jugadores. Pero ni el mayor acreedor, Capitalia, ni otros bancos quieren pilotear la operación, porque no les parece seria y no desean enfrentarse a la Comisión Europea.
