C-8: DuPont, a punto de ser multada en Estados Unidos
La Agencia de Protección Ambiental norteamericana está dispuesta a imponer multas a la química DuPont. Eso se debe a que la firma no informó sobre resultados negativos de pruebas sobre C-8, componente asociado a la manufactura de teflón.
La compañía hizo hace 23 años experimentos según los cuales la substancia llamada C-8 comporta riesgos para humanos. Las pruebas involucraban la transmisión de ese químico entre una trabajadora embarazada y el feto. También se detectaron –hace trece años- residuos de C-8 en bebederos públicos cerca de la planta de teflón.
Pero DuPont mantuvo en secreto los resultados de ambas pruebas en laboratorio. Así reveló la EPA (siglas de la agencia en inglés), Legalmente, ni siquiera el Congreso puede obligar a ese tipo de pruebas pero, si se hacen, sus resultados deben ser públicos. Así determina la ley sobre control de substancias tóxicas.
La entidad también descubrió otra transgresión de la empresa. En este caso, datos toxicológicos completos recogidos sobre el C-8, durante experimentos hechos desde 1997, a pedido de la propia EPA. DuPont adelantó que impugnará las inminentes multas. Según la agencia, éstas podrían alcanzar cientos de millones.
Expertos del sector privado señalan que no está claro si el C-8 (ácido perfluorooctanoico) daña a humanos. Según estudios específicos, la substancia causa defectos de desarrollo en ratas, pero esas pruebas no pueden hacerse en personas. En 1981, DuPont obtuvo resultados de investigaciones hematológicas en embarazadas, entre ellas la que detectó transmisión de C.8 a un feto. De acuerdo con la EPA, no se siguió después la evolución del niño.
Diez años más tarde, apareció el mismo químico en bebederos públicos a la vera del río Ohio, que pasa por la planta de DuPont en Washington (Virginia occidental). La concentración de C-8 excedía las propias normas de la firma, Pasó otra década y, en marzo de 2001, se radicó una acción colectiva contra la compañía y los abogados remitieron a la EPA los estudios hechos en 1991, que DuPont mantenía en reserva.
La compañía hizo hace 23 años experimentos según los cuales la substancia llamada C-8 comporta riesgos para humanos. Las pruebas involucraban la transmisión de ese químico entre una trabajadora embarazada y el feto. También se detectaron –hace trece años- residuos de C-8 en bebederos públicos cerca de la planta de teflón.
Pero DuPont mantuvo en secreto los resultados de ambas pruebas en laboratorio. Así reveló la EPA (siglas de la agencia en inglés), Legalmente, ni siquiera el Congreso puede obligar a ese tipo de pruebas pero, si se hacen, sus resultados deben ser públicos. Así determina la ley sobre control de substancias tóxicas.
La entidad también descubrió otra transgresión de la empresa. En este caso, datos toxicológicos completos recogidos sobre el C-8, durante experimentos hechos desde 1997, a pedido de la propia EPA. DuPont adelantó que impugnará las inminentes multas. Según la agencia, éstas podrían alcanzar cientos de millones.
Expertos del sector privado señalan que no está claro si el C-8 (ácido perfluorooctanoico) daña a humanos. Según estudios específicos, la substancia causa defectos de desarrollo en ratas, pero esas pruebas no pueden hacerse en personas. En 1981, DuPont obtuvo resultados de investigaciones hematológicas en embarazadas, entre ellas la que detectó transmisión de C.8 a un feto. De acuerdo con la EPA, no se siguió después la evolución del niño.
Diez años más tarde, apareció el mismo químico en bebederos públicos a la vera del río Ohio, que pasa por la planta de DuPont en Washington (Virginia occidental). La concentración de C-8 excedía las propias normas de la firma, Pasó otra década y, en marzo de 2001, se radicó una acción colectiva contra la compañía y los abogados remitieron a la EPA los estudios hechos en 1991, que DuPont mantenía en reserva.
