Refugiados: vergüenza e improvisación en Europa

El caos en Hungría, con las fuerzas policiales arrancando a los refugiados de África y Medio Oriente de los trenes hacia países europeos para alojarlos en campos provisorios, conmocionó a la opinión pública mundial y perturbó a todos los países europeos. Desde 1945 que el continente no presenciaba un masivo traslado de emigrantes o de refugiados, como se prefiera llamarlos.

4 septiembre, 2015

Centenares de familias abordaron los trenes creyendo que iban hacia Alemania. Pero los obligaron a bajar en una estación a 40 kilómetros de Budapest, para “ser clasificados”. Se ignora por el momento cuál será su destino final o qué país les brindará asilo. Estas escenas, junto con la foto del niño sirio de tres años ahogado con su madre y su hermano ha provocado manifestaciones de solidaridad en todo el continente. Especialmente entre los ingleses que reclaman a su gobierno medidas para facilitar el ingreso de algunos millares de refugiados.

Entre julio de 2014 y julio de 2015, hubo 210.000 pedidos de asilo nada más que de ciudadanos sirios. Pero el número total actual, de todas las nacionalidades (somalíes, librios, eritetreos, nigerianos, afganos e iraquíes) se estima que llega a 568.000 pedidos de asilo.

La irrupción de esta gente desesperada hizo colapsar los mecanismos de asistencia en Italia, en Grecia y especialmente en Hungría (que comenzó a levantar una pared en la frontera con Serbia).

Lo cierto es que tras cinco años de guerra civil en Siria (donde son varios los grupos contendientes), no hay perspectiva de solución a largo plazo y la situación tiende a complicarse más. Buena parte del país está bajo el control directo del Ejército Islámico y no hay, internamente, ningún grupo capaz de revertir la situación. Más de 7 millones de sirios se han desplazado de una parte a otra del país, mientras que otros cuatro millones buscaron refugio en Jordán, Líbano y Turquía, los países vecinos. Una de cada cuatro personas en Líbanos, es un refugiado. Algo similar ocurre con Jordania, con creciente desempleo y asilados palestinos e iraquíes, además de los sirios. Turquía es el país que más refugiados ha recibido, con consecuencias políticas y sociales.

Por primera vez en todo este tiempo, aparece un Europa la idea de un programa internacional consensuado para gestionar y manejar esta tremenda crisis. Apenas 9.000 sirios fueron acogidos por EE.UU y la Unión Europea desde 2011.

Alemania ha tomado la delantera, y parece que otros gobiernos europeo seguirán sus pasos. Pero la tarea pendiente es inmensa.

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