Una oportunidad perdida (o la conjura de los hechos)

Todo (el adelanto de las elecciones, la crisis internacional y una normativa poco clara) conspiró para que el blanqueo de capitales (al que tan bien le cabe lo de exteriorización y repatriación, ya que básicamente se trata de declarar lo que está “adentro” del colchón o afuera del país) termine en un fracaso. Para los analistas fue una gran chance desaprovechada.

17 noviembre, 2012

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