Energía solar térmica

A lo que sabemos de energía solar, se le agrega ahora la palabra “térmica”. Esa nueva tecnología “térmica-solar” puede solucionar los problemas de intermitencia, pero por ahora es más cara.

8 abril, 2014

Cuando a principios de este año se inauguró la planta solar térmica más grande del mundo en medio del desierto de California, sólo recibió muestras de escepticismo. La planta, llamada Ivanpah y está ubicada en el desierto de Mojave es impresionante: 300.000 mil espejos,  cada uno del tamaño de la puerta de un garaje,  redirigen los rayos solares hacia tres torres de 140 metros que generan temperaturas altísimas.   El calor produce vapor que alimentan el mismo tipo de turbinas que usaban las plantas energéticas de combustibles fósiles. Ese calor se puede almacenar y usar cuando el sol se pone mucho más económicamente de lo que cuesta almacenar electricidad en baterías.

¿Por qué el escepticismo entonces?  Muchos expertos – incluso algunos que invirtieron en la planta – dicen que Ivanpah  — producto de la asociación de NRG Energy, Google y BrightSource Energy — podría ser la última en su tipo. David Crane, CEO de MRG Energy, dice que los números parecían bien cuando la planta fue propuesta hace seis años. Desde entonces el precio de los paneles solares fotovoltaicos convencionales se desplomó. A diferencia de los paneles convencionales los paneles solares térmicos pueden generar energía incluso cuando el sol no está. Pero en la práctica, esta energía es mucho más cara que la producida por combustibles fósiles  y la electricidad de paneles solares.  Y es esa realidad la que ha volcado a los científicos a buscar formas de hacer la tecnología más competitiva.

Otra opción, que está siendo financiada por un nuevo programa en la U.S. Advanced Researcdh Projects Agency for Energy, es la de agregar paneles solares a las plantas de energía solar-termal. La idea es que los paneles solares sólo pueden convertir en electricidad luz de determinadas longitudes de onda. Mucha de la energía en luz infrarroja y ultravioleta, por ejemplo, no se convierte sino que se emite como calor. Los nuevos proyectos buscan formas de aprovechar ese calor.

Los sistemas solares que combinan paneles solares y de calor no son nuevos.  Hace muchos años que las empresas vienen ofreciendo sistemas solares que tienen cañerías de agua  instaladas detrás de los paneles: el calor que emiten los paneles calienta el agua lo suficiente para la ducha del baño.

Ahora se buscan formas de elevar mucho más la temperatura, lo suficiente como para usarlo para generar electricidad. Esos métodos implican concentrarse en la luz solar para generar altas temperaturas y luego redirigir parte de esa luz concentrada hacia paneles solares. La esperanza es que el costo adicional es estos sistemas híbridos se compense con dos cosas. Primero, los sistemas serán más eficientes y convertir más de la mitad de la energía de la luz solar en electricidad, comparado con 15% a 40% de los paneles solares actuales. Segundo, la capacidad para almacenar calor para uso cuando se lo necesite será más valiosa cuando haya más energía solar instalada.

 

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades