¿Por qué eBay se ha comprado Skype?

eBay pagará unos US$ 1.500 millones por algo que, hace un año, casi nadie conocía. Salvo privilegiados, como James Enck, analista de Daiwa Securities, Tokio. Es una historia breve pero muy ilustrativa.

14 septiembre, 2005

En febrero de 2004, Enck reveló vía EuroBlog que algunos equipos de la consultora Accenture estaban desechando sus canales usuales; es decir, teléfonos de tecnología GSM (sistema global de comunicaciones móviles). Frustrados por líneas erráticas y cortes, se pasaron a Skype, un servicio por Internet muy mal visto entonces.

Esos grupos lo adoptaron por dos razones: bajísimo costo y superior calidad de sonido. Muy bien, pero ¿qué es Skype? Simplemente, un “softófono”, o sea un teléfono basado en software que emplea la computadora, el celular, el asistente personal o lo que esté conectado a la web, para transportar simultáneamente voz, datos y mensajes instantáneos.

A diferencia del creciente número de “protocolos de voz por Internet” (VoIP), ofrecidos por telefónicas o cables, Skype es un sistema entre pares o iguales. Ello significa que crea nexos “ad hoc” entre computadoras por Internet, cada vez que un usuario quiere llegar a otro. En este contexto, no hay redes centrales que monitoreen o administren la conexión.

Dado que el sistema elimina intermediarios, las llamadas entre pares son gratuitas. Los ingresos de la firma provienen de vender servicios que permiten a los abonados llamar a gente que aún no ha descargado el software (cuyo precio no sube de doce dólares). En la mayoría de los mercados, conectarse de un dispositivo con Skype a un teléfono convencional cuesta generalmente dos centavos por minuto. La calidad de sonido es superior, primordialmente, porque no está limitada al espectro habitual (300 hertsios/3 kilohertsios), una banda relativamente estrecha.

Skype fue creada en agosto de 2003 por dos suecos, Niklas Zennströn y Janus Friis, que ya habían lanzado Kazaa. Este sistema de intercambio de música e imágenes entre pares llegó a ser el más descargado en Internet. Skype –sus fundadores pronuncian “shüpe”-, manejado desde Luxemburgo, afirma que invierte apenas un centavo por subscriptor que capta. Vonage, un líder en VoIP, debe gastar US$ 150 por cada nuevo abonado.

Desde el debut, los suecos han reclutado 35 millones de usuarios y llegan a tener más de tres millones logueados al mismo tiempo en su red. Con semejantes factores en favor, todo debiera marchar viento en popa. Pero no. De hecho, es una pesadilla para gerentes de telcos y firmas TI. En primer lugar, porque encripta el tráfico y torna imposible monitorear qué hace o dice un empleado por esa vía. En segundo lugar, Skype no imita a otros servicios VoIP y penetra las redes empresarias como una aplicación anexa a un dispositivo móvil. De esa manera, podría –en teoría- abrir desde adentro agujeros en los blindajes de seguridad.

Pero, sea como fuere, pronto las compañías deberán tomar más en serio a Skype: su arquitectura de igual a igual es una de las más eficaces y directas en materia de interacción digital. Por eso eBay se pone con US$ 1.500 millones.

En febrero de 2004, Enck reveló vía EuroBlog que algunos equipos de la consultora Accenture estaban desechando sus canales usuales; es decir, teléfonos de tecnología GSM (sistema global de comunicaciones móviles). Frustrados por líneas erráticas y cortes, se pasaron a Skype, un servicio por Internet muy mal visto entonces.

Esos grupos lo adoptaron por dos razones: bajísimo costo y superior calidad de sonido. Muy bien, pero ¿qué es Skype? Simplemente, un “softófono”, o sea un teléfono basado en software que emplea la computadora, el celular, el asistente personal o lo que esté conectado a la web, para transportar simultáneamente voz, datos y mensajes instantáneos.

A diferencia del creciente número de “protocolos de voz por Internet” (VoIP), ofrecidos por telefónicas o cables, Skype es un sistema entre pares o iguales. Ello significa que crea nexos “ad hoc” entre computadoras por Internet, cada vez que un usuario quiere llegar a otro. En este contexto, no hay redes centrales que monitoreen o administren la conexión.

Dado que el sistema elimina intermediarios, las llamadas entre pares son gratuitas. Los ingresos de la firma provienen de vender servicios que permiten a los abonados llamar a gente que aún no ha descargado el software (cuyo precio no sube de doce dólares). En la mayoría de los mercados, conectarse de un dispositivo con Skype a un teléfono convencional cuesta generalmente dos centavos por minuto. La calidad de sonido es superior, primordialmente, porque no está limitada al espectro habitual (300 hertsios/3 kilohertsios), una banda relativamente estrecha.

Skype fue creada en agosto de 2003 por dos suecos, Niklas Zennströn y Janus Friis, que ya habían lanzado Kazaa. Este sistema de intercambio de música e imágenes entre pares llegó a ser el más descargado en Internet. Skype –sus fundadores pronuncian “shüpe”-, manejado desde Luxemburgo, afirma que invierte apenas un centavo por subscriptor que capta. Vonage, un líder en VoIP, debe gastar US$ 150 por cada nuevo abonado.

Desde el debut, los suecos han reclutado 35 millones de usuarios y llegan a tener más de tres millones logueados al mismo tiempo en su red. Con semejantes factores en favor, todo debiera marchar viento en popa. Pero no. De hecho, es una pesadilla para gerentes de telcos y firmas TI. En primer lugar, porque encripta el tráfico y torna imposible monitorear qué hace o dice un empleado por esa vía. En segundo lugar, Skype no imita a otros servicios VoIP y penetra las redes empresarias como una aplicación anexa a un dispositivo móvil. De esa manera, podría –en teoría- abrir desde adentro agujeros en los blindajes de seguridad.

Pero, sea como fuere, pronto las compañías deberán tomar más en serio a Skype: su arquitectura de igual a igual es una de las más eficaces y directas en materia de interacción digital. Por eso eBay se pone con US$ 1.500 millones.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades