La aventura náutica

Aventurarse. En la niñez, la aventura está teñida de atrevimiento. A partir de la adolescencia, es una palabra que nos acompaña con un significado particular, es la bonificación especial que trasciende el límite, lo convencionalmente permitido. Y el agua fue, desde los orígenes de la humanidad, el vínculo ineludible de la aventura.

17 noviembre, 2012

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