Burbujas de diciembre
Anécdotas y datos del famoso espumante en una entrevista exclusiva con la mujer más glamorosa y potente del mundo del vino. Aunque no se necesitan justificaciones para beber una copa de esta mágica bebida, este es sin duda el mes donde más descorches se realizan en el mundo.
21 diciembre, 2009
<p>Por Sabrina Cuculiansky</p>
<p>Moët et Chandon es una de las marcas que tiene sus raíces en una increíble historia que data del siglo 18 en Francia. La venezolana Margareth Henriquez, embajadora de la firma, relata en una charla con <em>Mercado</em> una interesante historia que incluye la región de Champagne, la ópera, a Napoleón, la llegada de las burbujas a la Argentina y al desarrollo actual del mundo de las burbujas.</p>
<p><strong>–¿Cuándo comienza el desarrollo de Chandon y su producción en Francia?</strong><br />
–Moët et Cie fue fundada en Epernay, Francia, en la región de Champagne en 1743 por Claude Moët quien enviaba sus vinos a nobles y aristócratas de París en los tiempos del reinado de Luis XV (1715-1774). Su nieto y sucesor, Jean Remy Moët, construyó Trianon, el primer hotel en Epernay, visitado por personalidades como Napoleón o Richard Wagner –quien dijo haberse ido allí para crear la ópera Tristán e Isolda. <br />
En 1832, Jean Remy Moët se retira y deja a su hijo Víctor quien, junto a su cuñado Pierre Gabriel Chandon de Brialles, la nombran Moët et Chandon, hasta que, en 1950, Robert Jean de Vogue toma la presidencia y expande la empresa al adquirir otras casas como Ruinart, Veuve Clicquot y Krug, que conforman el portafolio más importante de la región de Champagne. En la actualidad en manos de nuestro grupo, Moët Hennessy – Louis Vouitton, líder de lujo en el mundo, sinónimo de elegancia y creatividad.</p>
<p><strong>–¿Cuándo llega el espumante a la Argentina?</strong><br />
–En 1950, Jean de Vogue quería expandirse al mismo tiempo que llega a la Argentina Renaud Poirier, el enólogo más reconocido del siglo 20 en la región de Champagne. Poirier viene en busca de tierras que permitieran crear burbujas de alta calidad fuera de Francia. Supo identificar que Mendoza sería origen de grandes vinos. <br />
La experiencia de 215 años de la casa Moët et Chandon se encuentra con el entusiasmo de un conocedor de grandes vinos y dos años más tarde elaboran la primera botella cuyo nombre fue M. Chandon. Años después se llamaría Chandon. Robert Jean de Vogue decía entonces que Moët et Chandon tenía la suerte de contar con dos marcas en una, llamaría a su champagne Moët, y a sus burbujas fuera de Francia, Chandon.</p>
<p><strong>–¿Por qué en Mendoza?</strong><br />
–Increíblemente, el gran enólogo Renaud Poirier no buscó una región con características parecidas a la región de Champagne. En Mendoza, con poca lluvia y mucho sol, contrario al clima nublado francés, se encontraron los microclimas adecuados que permitieron desarrollar las variedades Chardonnay y Pinot Noir, dos de las utilizadas en Champagne; Semillion –la variedad blanca utilizada en Burdeos para los blancos– que sustituyó con muchos beneficios al Pinot Menieur que no logró expresarse en Mendoza. También el Malbec, que se incorporó en los rosé logrando burbujas excepcionales.</p>
<p><strong>–¿Podrían definirse tres hitos de la marca en el país?</strong><br />
–En 1958, cuando se tomó la decisión de instalarse en la Argentina y se descubrió el potencial vitícola; en 1960, cuando se elaboró con éxito la primera botella de Chandon y en noviembre del año 2005, cuando en un evento sin precedente se celebraron en la residencia del embajador de Francia los 45 años de esta marca.</p>
<p><strong>–¿Hubo cambios en el consumo?</strong><br />
–Sí, en la frecuencia, pero sobre todo las oportunidades de consumo de Chandon han cambiado, de la mano de los desarrollos y propuestas del portafolio de Chandon y de las distintas actividades que realizamos para permitir a nuestros consumidores descubrir nuevas oportunidades para compartirlo.</p>
<p><strong>–¿Quién es hoy el principal consumidor?</strong><br />
–Muy diverso, hombre y mujer, de distintas edades, jóvenes y mayores. Chandon es una marca que contiene con sus distintas propuestas a muchos consumidores de diversos perfiles y en diferentes momentos.</p>
<p><strong>–¿Qué diferencias proponen los distintos métodos de elaboración? ¿Son conocidos por el consumidor? </strong><br />
–Puede ser que algunos consumidores conozcan acerca de los distintos métodos, sin que ellos tengan repercusión en la calidad del espumante. El método se define en función del estilo de espumante que quiere lograrse. <br />
El estilo, concentración de los vinos, levaduras traídas de Moët et Chandon, tiempos en contacto con levadura y el arte del <em>“assamblage” </em>definen el alma de cada uno de los vinos elaborados bajo la marca Chandon en sus distintas propuestas. Estos conocimientos claves se pasan como grandes secretos de uno a otro de los jefes de cavas.</p>
<p><strong>–¿Cómo funciona hoy el espumante en América latina y en los países productores de Europa?</strong><br />
–El mercado de espumantes en Latinoamérica es realmente chico, pero ha mostrado crecimientos interesantes en algunos países como Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Paraguay y Uruguay.<br />
En Europa, durante estos últimos años nuestras marcas de <em>champagnes</em> mostraron crecimientos extraordinarios. En estos tiempos y como respuesta a cambios en la economía global, esperamos una variación en este ritmo de crecimiento, pero cuando vemos los cientos de años que acumulan la historia de nuestras marcas, sabemos que la fortaleza de sus raíces las convierten en el espacio de contención que buscan los consumidores en momentos de dificultad.</p>