La frivolidad hace infelices a los niños
La superficialidad de la sociedad actual, que endiosa el aspecto físico, está generando infelicidad infantil sin precedentes, dice un estudio. El iforme pide devolver a los niños a la infancia.
Uno de cada cinco niños entre 10 y 15 años manifiestan insatisfacción con su apariencia, reveló un estudio reciente de la Children’s Society en Gran Bretaña. Las niñas se aflijen el doble que los niños.
El problema crece a medida que van creciendo: 28% de las niñas de 15 años dicen estar disconformes con su cuerpo.
Los investigadores británicos culpan de esta infelicidad a una cultura que ensalza la imagen y advierte que les podría provocar problemas de salud mental en la adultez.
Andrew Hill, profesor de psicología médica en la Universidad de Leeds, quien se especializa en desórdenes alimentarios e imagen corporal, dice que las niñas viven bajo una fuerte presión de verse bien desde muy temprano.
“Eso tiene que ver con que la sociedad valora a las mujeres por su apariencia y con la transmisión cultural de ese valor social. A menudo las niñas entienden eso desde bastante antes de los 10 años.
“Vivimos en una cultura muy superficial donde las apariencia es absolutamente todo, tanto en política como en la música pop.Cada vez que alguien está en público se encuentra bajo el escrutinio del público.”
La baja confianza es la segunda fuente de angustia entre los niños: 16 % dijo que esa es la razón de su infelicidad, mientras que 14% mencionó problemas en el área donde vive y 12% dijo que su mayor problema son los deberes escolares.
Un promedio de dos niños por clase dijo es muy infeliz. El informe final de la encuesta, que relevó casi 7.000 niños, urge a los anunciantes que dejen de alentar a los niños a sexualizarse demasiado temprano, un pedido que fue respaldado por el gobierno. “La sexualización prematura de nuestros niños ha llegado demasiado lejos. Este informe destaca la infelicidad que esto está creando en la vida de los niños, especialmente entre las niñas en edad adolescente”.
“Las empresas, los anunciantes y los medios deben abrir los ojos al impacto que están teniendo en la vida de los niños y comenzar a ejercer más responsabilidad empresaria. Es hora de hacer volver a los niños a la infancia.”
